– Desde hace 20 años se reconoce el Día de las Manos Rojas, una conmemoración nacional e internacional en contra el reclutamiento y utilización de niños, niñas y adolescentes por parte de los grupos armados ilegales.
– Solo en el último año Save the Children registró 26 casos de reclutamiento en Norte de Santander, Nariño, y Arauca respectivamente. Lo anterior sigue la tendencia creciente en los casos registrados por organizaciones de la sociedad civil que registran un aumento del 11% en el último año (COALICO 2021).
– El recrudecimiento del conflicto en algunas zonas por la presencia y control territorial de diferentes grupos armados ha aumentado los casos de reclutamiento forzado. Toda persona menor de 18 años que haya estado en alguna de estas condiciones se reconoce como víctima, tanto para la legislación colombiana como bajo la mirada del Derecho Internacional Humanitario.
Como todos los 12 de febrero, desde hace 20 años, el mundo conmemora en esta fecha el “Día Mundial de las Manos Rojas”, que celebra la entrada en vigor del Protocolo facultativo de la Convención sobre los Derechos del Niño [y la Niña] relativo a la participación de niños en los conflictos armados (OPAC por sus siglas en inglés). Han sido muchas las voces que se han unido para reafirmar el compromiso de evitar que las vidas de niños, niñas y adolescentes se vean afectadas por la guerra. Es prioritario lograr mejores condiciones para la garantía y restablecimiento de los derechos de quienes ya han sido víctimas del conflicto armado o pueden serlo.
A pesar de la firma del acuerdo de paz en 2016, durante el último año, Save the Children Colombia ha enfocado gran parte de sus esfuerzos en seguir atendiendo a miles de niños, niñas, adolescentes y sus familias que siguen siendo afectados por el conflicto armado. La labor de nuestros equipos en los departamentos de Valle del Cauca, Nariño, Arauca y Norte de Santander llegó a beneficiar a 31.659 niños y niñas, y a más de 12.000 adultos, que se han visto afectados por desplazamientos forzados, masacres, confinamientos, restricciones de movilidad y afectaciones socioemocionales.
Aunque existe un alto sub registro de esta problemática debido a que son zonas apartadas, las víctimas tienen temor a denunciar, y hay desconocimiento y falta de recursos para atender estos casos; es prioritario que las alcaldías con apoyo de la UARIV, el SNBF y actores humanitarios tomen acciones inmediatas para prevenir estos delitos. Por esta razón, queremos hacer de nuevo un llamado a las autoridades, colegios, familias, gobierno y la sociedad en general, a proteger y cuidar los entornos de los niños, niñas y adolescentes en todo el país. Es urgente reportar de manera clara, organizada y veraz cifras oficiales y desarrollar acciones efectivas para proteger y garantizar los derechos de los más afectados.
Es de vital importancia crear entornos de protección para la niñez; además de robustecer los ya existentes, para evitar que los niños, niñas y adolescentes se vean forzados a vincularse con actores armados y actividades ilegales. Los derechos de las niñas y niños requieren una protección especial y es necesario seguir mejorando su situación sin distinción alguna para que puedan acceder a una educación en condiciones de paz y seguridad.
Es deber y compromiso de todos seguir condenando situaciones donde los niños y niñas se convierten en blancos de guerra. No podemos aceptar ataques directos contra bienes protegidos por el derecho internacional, incluidos los lugares donde suele haber una considerable presencia como escuelas y hospitales.
Agudización del conflicto en Colombia
En las primeras semanas del 2022 hemos observado con preocupación cómo la situación de conflicto se ha agudizado en departamentos como Arauca, Meta, Norte de Santander, Nariño y Valle del Cauca. Se han presentado amenazas constantes en contra de la población civil por parte de grupos armados que delinquen en estas zonas y se disputan el control territorial. Varias comunidades se encuentran en completo confinamiento, en cese total de actividades y el servicio de transporte fluvial de carga y de pasajeros está totalmente suspendido, lo que ha generado desabastecimiento en gran parte del territorio.
El departamento de Arauca atraviesa una triple afectación humanitaria, que se ha visto agudizada por hechos de violencia en los municipios de Arauquita, Fortul, Saravena y Tame, en donde los niños, niñas y jóvenes se encuentran en alto riesgo de afectación física y psicológica. En Nariño, la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) junto a la Alcaldía de Mosquera realizó un Consejo Municipal de Justicia Transicional el pasado 27 de diciembre/2021, donde se declaró el desplazamiento masivo y la activación del plan de contingencia para la atención de la emergencia.
Así mismo, rechazamos la acción de grupos armados en Norte de Santander con un vehículo marcado como “carro bomba” en una vía que comunica a los municipios de Tibú y El Tarra; lo que afecta a las comunidades, generando miedo e incertidumbre y afectando su cotidianidad.
En todos los casos nombrados, Save the Children Colombia ha hecho un llamado a unir esfuerzos humanitarios y salvaguardar con urgencia la vida de los niños, niñas, jóvenes y comunidades, quienes han quedado en medio del fuego cruzado entre grupos ilegales.
Escuelas seguras, una herramienta para evitar el reclutamiento
La educación como uno de los Derechos Humanos fundamentales, es la vía por la cual los niños, niñas y adolescentes fortalecen no solo habilidades para la vida, sino competencias que permiten su crecimiento personal y desarrollo integral. De esta manera, es responsabilidad del Estado, la familia y la sociedad garantizar integralmente que esta población acceda, permanezca y se formen en un sistema educativo incluyente y de calidad.
El movimiento Save the Children, alrededor del mundo promueve de manera activa la reflexión y acción frente a la importancia de la firma de la Declaración de Escuelas Seguras. En Colombia, constantemente se busca la interlocución permanente con las entidades del Estado para incorporar los compromisos asumidos al adoptar la Declaración.
La ‘Declaración de Escuelas Seguras’, es un compromiso político intergubernamental para proteger a los estudiantes, profesores, escuelas y universidades de los peores efectos del conflicto armado, ha sido suscrita por 80 países hasta el momento. No es tiempo para esperar, los niños y niñas de Colombia merecen crecer en entornos de calidad, seguros, y en paz, este es el compromiso para #ProtegerAUnaGeneración.