Una madre valiente
Colombia, 10 de mayo del 2024
Milena, es una mujer valiente. Desde su infancia ha vivido situaciones muy dolorosas como el abuso sexual ejercido por su padre, la ausencia de los cuidados de su madre, quien por situaciones económicas tenía extensas jornadas de trabajo. No tuvo la oportunidad de ir al colegio, no pudo disfrutar de su infancia y jugar con otras niñas y niños.
Ella decidió migrar desde su país de origen, en el año 2017. “Un día decidimos salir de nuestra casa con mis hijos y pareja porque en el barrio estaban extorsionando, tuvimos que venirnos con la mera ropa y dejar todo. Cuando llegamos a Colombia la primera semana fue duro porque no teníamos luz ni agua. Después nos fuimos a otro departamento y vivíamos en un barrio peligroso, allá veíamos muchas armas, drogas, nos tocaba dormir en el piso, una vez hubo un enfrentamiento entre la policía y otros grupos, duramos 5 meses allá y nos regresamos a La Guajira, mi esposo montó un local de llantas y eso nos daba para cubrir los gastos, pero llegó la pandemia y todo se fue acabando.”
Al poco tiempo, se enteró de que su esposo sostenía una relación extramarital, ella se sintió traicionada, no concebía esto como algo respetuoso ni parte de los acuerdos de su relación de pareja; esta situación, sumada a todas las que ya había enfrentado, desencadenó malestar emocional que se reflejó en el aumento de su apetito, dolores de cabeza constantes e intensos y llanto frecuente.
Sumado a esto, Milena tenía dificultad para conciliar el sueño, sentía una fuerte opresión en su pecho y empezó a experimentar sentimientos de rechazo hacía sus hijas e hijo.
Cuenta que nunca recibió ayuda ni habló con nadie respecto de cómo se sentía, nunca había hablado de su salud mental con nadie. Para ese momento, su pareja, con quien seguía conviviendo, decidió irse a otro País en búsqueda de otras oportunidades, dejándola sola a cargo de sus dos hijas e hijo.
Fue allí cuando Milena sintió que se desbordaba y no sabía cómo manejar la situación, todo el malestar que venía sintiendo años atrás se fue aumentando y notó que no era la misma persona alegre que había sido antes.
Por ello, decidió acercarse a los servicios de salud mental y apoyo psicosocial de Save the Children, los cuales conoció porque participaba de actividades comunitarias realizadas por los diferentes componentes de la organización. Cuando asiste a la primera consulta, cuenta que tenía mucho miedo de estar sola, porque cuando no había personas cerca de ella la invadía una tristeza profunda, lloraba, y pensaba cómo sería el mundo si ella dejará de existir, tenía en su mente ideas de que le podía pasar algo a sus hijas o hijo, recordaba cuando era niña, la infidelidad de su pareja, extrañaba a su madre, y sentía que era muy difícil respirar, mencionó que se sentía muy cansada.
“Me enseñaron ejercicios de respiración, y también me ayudaron a estabilizar mis emociones en los momentos difíciles o de crisis. Estoy muy agradecida con Save the Children, con las oportunidades que mi familia y yo hemos tenido, nunca había tenido la oportunidad que me escucharan. Me han ayudado mucho, ya no tengo todos esos pensamientos que eran terribles. He cambiado con mis hijos, siento que me doy más amor, y también a mis hijos, siento que hasta ahora he empezado a entender que quedarse sola, callada y hacer que no pase nada, solo empeora con el tiempo” Comenta mientras sonríe.
Milena es una mujer valiente, porque a pesar de cada situación difícil y pidió ayuda cuando sintió que ya no podía más. Ella quiere volver a estudiar, hacer labores sociales, ayudar y orientar a otras personas, hacerles saber que una forma de ser fuerte es pedir ayuda, y enseñarles a las mujeres a cultivar su autoestima y amor propio. Ha reconocido la importancia de buscar ayuda y ha sido facilitadora para que otras mujeres de su comunidad pueden acceder al servicio de salud mental y apoyo psicosocial.
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Contacto:
Yaira Ojeda – Oficial de Comunicaciones
yaira.ojeda@savethechildren.org
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