A partir de los hechos de violencia que se han presentado en el departamento del Cauca en los últimos días, y el más reciente ocurrido ayer, en inmediaciones de una institución educativa en Corinto, Save the Children Colombia rechaza todo acto de violencia que pueda atentar contra la vida de los niños, niñas, adolescentes, jóvenes y sus familias. Esta misma situación se presenta en Tumaco.

Para prevenir este tipo de situaciones y promover que las instituciones educativas de nuestro país se conviertan en espacios de protección, instamos a los actores en conflicto a abstenerse de, en el marco de sus operaciones militares, poner en riesgo bienes protegidos por el Derecho Internacional Humanitario  como son los espacios educativos, y al Gobierno Nacional a suscribir la Declaración de Escuelas Seguras para prevenir, registrar y reparar los ataques a la educación que presentan una situación creciente desde la firma de los Acuerdos de Paz pasando de 20 ataques registrados según GPCA a 35 en 2021.

La iniciativa mundial de #EscuelasSeguras promueve que se tengan centros educativos seguros, una respuesta educativa a emergencias en las escuelas y educación para la resiliencia y reducción del riesgo. De la misma manera, continuar con el sistema de seguimiento y monitoreo que permite reportar acerca de los avances en la implementación de escuelas seguras a nivel mundial.

En nuestro país, durante los últimos años ha incrementado el número de ataques a la educación, a las escuelas, a personas de la comunidad educativa, eventos de uso militar en instalaciones educativas y ataques a la educación superior. Es así como entre 2020 y el primer semestre de 2021 Save the Children Colombia identificó un total de 66 ataques. La Coalición Mundial para Proteger la Educación de Ataques, GPCA, señala una tendencia creciente en estos ataques en Colombia después de la firma del Acuerdo de Paz, y en especial entre 2020 y 2021 cuando se registraron 35 ataques frente a 20 en 2018, principalmente en zonas rurales de Arauca, Córdoba, Nariño y Norte de Santander que afectaron a 650 niños y niñas, así como 35 agresiones a escolares, docentes y otros personal de educación frente a 24 casos reportados entre 2019 y 2018, principalmente en Antioquia, Cauca y Huila, donde grupos armados no estatales asesinaron y amenazaron docentes por su participación en los sindicatos de docentes, lo que constituye un aumento en comparación.

A partir de este panorama, los niños y niñas presentaron un manifiesto señalando que para ellos y ellas una escuela segura representa sus “amigos, amigas, seguridad, aprender sin limitaciones y emociones positivas. Pero, desgraciadamente, en el día a día de nuestro mundo actual, gran parte de la niñez no vive esta realidad. Por eso debemos asegurarnos de que se escuche nuestra voz para poder gozar de nuestras escuelas seguras”.