La escritura y el dibujo se han convertido en los mejores aliados de los primos Emily y Yandro, 13 años, desde que llegaron a Colombia provenientes de Venezuela, pues como no han podido matricularse en el colegio ellos mismos repasan la lección y ocupan su tiempo libre transcribiendo libros, leyendo y dibujando todo lo que se les venga a la cabeza.
Aunque ambos ya conocían el departamento de La Guajira nunca imaginaron que aquel lugar que frecuentaban en vacaciones se iba a terminar convirtiéndose en su hogar, y que la familia estaría aún más unida pues diez personas, entre primos, hermanos y tíos comparten la misma vivienda en el mucipio de San Juan del César.
La historia de Emily y Yandro en sus propias palabras:
Hace tres años Emily y su familia llegaron a vivir a La Guajira en busca de mejores oportunidades de vida y desde entonces no ha podido volver a estudiar, pese a que este es uno de sus mayores anhelos. Una situación similar vive su primo Yandro, quien arribó a San Juan del Cesar hace tres meses en plena pandemia y también está por fuera del sistema escolar.
“Nos vimos de nuestro país porque la situación del país estaba difícil, no había comida nada. Lo más duro de venirme para acá fue no poder estudiar porque mi mamá no tenía plata para comprarme los útiles y los uniformes”, detalló acongojada Emily.
Ella estaba a punto de ingresar a bachillerato tras la mudanza fronteriza, y desde entonces ha tenido que ver desde la ventana cómo sus vecinas y amigas salían rumbo al colegio. Un par de cuadernos viejos y lápices gastados son su consuelo, allí escribe sus pensamientos, transcribe citas de libros y pinta un poco mientas evoca sus tiempos en la escuela.
“Extraño mucho poder estudiar. La materia que más me gusta es matemáticas y por eso de vez en cuando le ayudo a mi hermano menor ha hacer la tarea. Aunque me gusta ayudarle me siento mal por no poder ir a clases, me siento vaga. Mis vecinos si están estudiando, mientras estoy en la casa”, relató afligida.
“Felicito a las niñas que si están estudiando, el estudio es muy bueno, yo sueño con ser abogada y espero que a través de Save the Children y su nuevo proyecto ‘El Mundo es mi Hogar’ yo pueda cumplir mi sueño de volver a estudiar”, agregó.
Aunque para Emily llegar a Colombia fue una experiencia muy dura por todo lo que implicó este cambio, para su primo Yandro llegar a este país fue toda una bendición y un cambio positivo para él y su familia.
“Nos vinimos para acá hace tres meses porque en Venezuela no había luz no había comida, agua ni gasolina,. Llegué con mis papás y mi hermana. Cuando me dijeron que nos veníamos me pareció bien porque íbamos a estar mejor aquí”.
“Aunque allá me sentía bien porque estaba con mi familia y mis amigos la felicidad no era completa por todo lo que nos faltaba. Mi abuela hizo un pozo en el patio para sacar agua y poder hacer el aseo, la luz la cortaban a cada rato. Como no teníamos luz no podíamos encender el aire acondicionado ni los ventiladores y nos daba mucho calor”.
Yandro confiesa que lo más duro de su partida fue dejar atrás su escuela y sus amigos, sin embargo se siente mejor en Colombia porque su vida cambió. “Acá tengo agua, luz, comida, tengo todo”.
“Me ha gustado vivir acá porque tengo unos buenos vecinos, tengo a mis primos que están al frente, tengo todo. Lo más duro ha sido no poder salir por la pandemia, no poder jugar con mis amigos. Durante la pandemia me he sentido triste y cuando me siento así me pongo a dibujar, a escribir, a leer.
“Me gustaría que a través del proyecto ‘El Mundo es mi Hogar’ poder estudiar en el colegio María Ema lo ha visto desde afuera, y quiero algún día sentarme en un salón de este colegio a aprender porque al igual que mi prima Emily quiero ser un gran abogado para ayudar a la gente”.
Contexto e información del proyecto:
San Juan del Cesar es municipio ubicado en el departamento de La Guajira y limita con Venezuela. Hace parte de los municipios incluidos en los Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET) priorizados por el Gobierno Nacional en el marco del Acuerdo de Paz. Tiene una población extimada de 37.000 habitantes.
A partir del 2019, Save the Children llega a los municipios de Fonseca, San Juan del César y Riohacha (La Guajira) a través del proyecto ‘El Mundo es mi Hogar’, centrado en mejorar la realización del derecho a una educación de calidad, segura y con perspectiva de género para las niñas y niños afectados por el conflicto y la crisis en la frontera colombo-venezolana. Con este último proyecto, que se implementará por 31 meses en la zona, se busca beneficiar a más de 30.403 niños, niñas y adolescentes que viven en la zona.