• Nueve de cada diez menores de edad víctimas de violencia sexual, son niñas.
• En 2019, 98 mil 583 mujeres fueron víctimas de violencia de género en Colombia. Los departamentos más afectados por la violencia de género son Valle del Cauca (484), Antioquia (457) y Bogotá (361).
• 5.659 niñas sufrieron de violencia intrafamiliar en el 2018, según Forensis 2018.
• 42.753 mujeres denunciaron violencia intrafamiliar en el 2018, de un total de 49.669 casos reportados. De estos 1.248 de estas mujeres, eran niñas entre los 10 y 17 años.
• En el 2018 se reportaron 26.065 casos de presunto abuso sexual, de ellos 19.328 correspondió a niñas menores de 17 años
Bogotá 7 de marzo de 2020. Para un país como Colombia en el que 2.657 mujeres en los últimos 10 años acudieron ante las autoridades a denunciar agresiones y que posteriormente fueron asesinadas por sus parejas, es de vital importancia considerar la violencia de género como un problema de salud pública que cada 36 horas cobra la vida de una mujer.
Según la Fiscalía, este drama se extiende por todo el país y los departamentos más afectados son Valle del Cauca (484), Antioquia (457) y Bogotá (361).
“Nuestra mayor preocupación es que, aunque hemos avanzado en materia de protección a las niñas y a las mujeres, aún la sociedad y la justicia sigue castigando a la víctima y no a su victimario. Debemos hacer un llamado a las autoridades y a las comunidades para que actuemos en consonancia con la ley y protejamos a las mujeres de cualquier tipo de violencia, investiguemos rigurosamente las denuncias y hagamos un correcto seguimiento de los casos para que no queden en la impunidad”. María Paula Martínez, directora de Save the Children Colombia.
A lo largo de la vida, una de cada tres mujeres y niñas en todo el mundo han sido víctimas de algún tipo de violencia de género. Esta cifra es alarmante y preocupante y sin duda alguna, a nivel global estamos trabajando y aunando esfuerzos para que esto no siga pasando y encontremos nuevas formas de prevención, protección y reparación para las niñas y mujeres víctimas.
En Save the Children, estamos comprometidos con cambiar esta realidad y sabemos que las violencias están sumamente arraigadas en la cultura y comportamientos de Colombia, pues hemos convivido con este problema desde siempre y por eso lo normalizamos y aceptamos como forma válida de convivencia. Sin embargo, este no puede ser un argumento válido para no intentar cambiar los imaginarios y construir una sociedad más consciente, más empática y más pacífica que respete los derechos de todas las niñas y las mujeres.
“Hemos soñado con ser abogadas, astronautas, politólogas, futbolistas, pero muchas niñas y mujeres no logran cumplir sus sueños porque son víctimas de violencia de género. En Colombia hubo un incremento del 3,32% en violencia de género, lo que se traduce en 17.009 mujeres víctimas y en una agresión cada 31 minutos a esposas, hijas, madres y amigas. Hay que poner un alto a esto. Es importante que le enseñemos a niños y niñas que las mujeres #SomosPoderosas y que podemos lograr lo que queremos, que no estamos solas en esta lucha por la igualdad y que la sociedad nos debe respeto.” María Paula Martínez.
Según nuestro informe Alto a la guerra contra la niñez 2020: la importancia del género, las niñas están mucho más expuestas que los niños a ser violadas, forzadas al matrimonio forzoso o a ser víctimas de otros abusos sexuales —el 87 % de los casos de violencia sexual verificados involucraron a niñas, mientras que el 1,5 % fueron perpetrados contra niños—. En el 11 % de los casos, no hay datos sobre el género. Somalia y la República Democrática del Congo fueron los países más peligrosos para las niñas.
Nuestra invitación en la Conmemoración del Día de la Mujer, es que no sigamos conviviendo con esta vergüenza, no sigamos pensando en que nada está pasando, movilicémonos en favor de las niñas y las mujeres, invirtamos en ellas, acompañémoslas e impulsemos su rol en la sociedad como motor del cambio social y el desarrollo del país.
La violencia de género no solo nos quita la vida, sino que también es un obstáculo para el desarrollo del país. Como sociedad y Estado hemos permitido que la vida de muchas se pierda, a ellas no las pudimos salvar, pero aún hay miles de mujeres y niñas en riesgo a las que les debemos poner todo nuestro esfuerzo para alejarlas de las violencias y la desigualdad.