Cuando Mayré, 13 años, llegó con su familia a Colombia en busca de un mejor futuro la primera barrera que encontró fue el dialecto, recuerda entre risas.
Venía del centro de Venezuela y se instaló en uno de los municipios que conforman la región del Catatumbo en el limítrofe departamento de Norte de Santander, y cuando fue a la tienda a comprar un refresco la cara que puso el tendero al oírla la hizo caer en cuenta de esta primera barrera.
-Toma tu gaseosa- le respondió entre risas el tendero del pueblo mientras le alcanzaba la botella.
Aunque pensó que adaptarse a una nueva región con dialectos y costumbres diferentes iba a ser un gran reto, gracias a la ayuda de sus vecinos y amigos pudo hacerlo sin dificultad.
Una situación similar le pasó a Wilainys y su familia cuando se radicaron en La Guajira. Aunque en Venezuela oía que el trato que recibían los migrantes en Colombia no era el mejor, y llegó con miedo al país. Asegura que ni sus vecinos ni sus compañeros de clase la han discriminado por su nacionalidad.
“Los migrantes no somos más ni menos que nadie, tenemos los mismos derechos y nos esforzamos a diario por cumplir esos sueños que nos vinimos persiguiendo”, afirma con certeza, mientras anima a sus coterráneos a no desistir. “Nosotros no estamos acá por nuestra voluntad, sino porque lo necesitamos».
Y es que, a pesar de las distancias geográficas, las restricciones propias por la pandemia por COVID-19, la falta de medios electrónicos para comunicarse y el escaso acceso a internet, siete niños migrantes residentes en Colombia y Venezuela se reunieron a dialogar sobre sus experiencias y vivencias en el webinar #MisSueñosVanConmigo, el cual fue transmitido en directo por la cuenta de Facebook de Save the Children Colombia.
Fue así como Wilaynis y Antony desde La Guajira, Michell desde Bogotá, Mayré, Adrian y Mariángel desde (Guamalito, Cúcuta y Sardinata) en Norte de Santander; y Breina desde San Antonio Venezuela, compartieron entre si sus sueños y anécdotas y permitieron que cientos de personas en todo el país pudieran escucharlos. Ellos estuvieron acompañados de Paula, desde Cali, quien hizo las veces de moderadora junto a Michell.
Los participantes aprovecharon este espacio para pedirle al Gobierno Nacional y a las comunidades de acogida mayor apoyo para la población migrante y resaltaron la importancia de garantizarles una educación segura y de calidad.
«Llevo dos años sin estudiar y eso a veces me hace decaer, pero también me hace más fuerte, porque se tengo que estudiar para cumplir mi sueño de ser médico forense. Nosotros necesitamos ayuda de parte del gobierno para que nos acepten en las escuelas», indicó Antony, desde La Guajira.
Con solo 14 años, Antony ha tenido que pasar por diferentes circunstancias junto a su familia por lo que les pide a las comunidades de acogida que les tengan paciencia a los migrantes y que no los juzguen sin conocerlos ni mucho menos los discriminen porque ellos tienen mucho que aportarle a Colombia.
A este espacio se sumó también la Embajada de Canadá haciendo un recuento de las acciones y planes que ejecuta actualmente a favor de la población migrante.
Marcel Lebleu, Embajador de Canadá, aseguró que la Embajada seguirá trabajando para crear las oportunidades para que niños y niñas tengan un futuro mejor. El proyecto ‘El Mundo es mi Hogar’ que implementa Save the Children en Arauca, Norte de Santander y La Guajira’, gracias al apoyo de la Embajada, es parte de estas importantes iniciativas a favor de la niñez.
NIÑOS Y NIÑAS CONTARON SUS VIVENCIAS
Largas caminatas para atravesar el puente internacional Simón Bolívar, en la frontera entre Villa del Rosario (Colombia) y San Antonio del Táchira (Venezuela), para poder asistir al colegio, la expulsión de colombianos residentes en Venezuela por parte del gobierno del presidente Nicolás Maduro, la crisis económica y social en Venezuela, entre otras situaciones, fueron relatadas por niños y niñas migrantes en el marco del concurso ‘Relatos sin Fronteras’ que realizó la Save the Children en el marco de la campaña #MisSueñosVanConmigo para conmemorar el Día internacional del Migrante.
María Paula Martínez, directora ejecutiva de Save the Children Colombia, fue la encargada de anunciar a los ganadores. Antes de la premiación, resaltó el valor, el coraje, la fuerza y la resiliencia de los miles de niños migrantes que han ingresado al país en los últimos tiempos y que representan cerca del 17% del total de migrantes y refugiados en Colombia.
Los ganadores fueron: Adrián García (Cúcuta), Breina Durán (Villa del Rosario) y Mariángel Colmenares (Sardinata).