Justin Andrey, 11 años, es oriundo de San Antonio del Táchira (Venezuela) y estudia en el municipio de Villa del Rosario. Antes de la pandemia cruzaba a diario la frontera entre Colombia y Venezuela para poder ir a clases. Ahora, desde la virtualidad, comparte el único celular que hay en su casa con su hermana para poder estudiar.
La historia de Justin Andrey en sus propias palabras:
“Tomar las clases virtuales ha sido un poco difícil porque en casa solo tenemos un celular, así que no lo turnamos con mi hermana. Yo lo uso por la mañana y ella por la tarde”, explicó Justin Andrey.
Pese a esta dificultad por la que atraviesa la gran mayoría de sus compañeros de clase del colegio Manuel Antonio Rueda Jara en Villa del Rosario (Norte de Santander), Justin Andrey asegura que desde enero cuando fue matriculado en territorio nacional su rendimiento académico al igual que su comportamiento mejoró.
“Allá en Venezuela era diferente estudiar. Me estaba yendo mal en el colegio y mi comportamiento no era el mejor. Acá me han recibido muy bien y siento que cada día soy una mejor persona”, dijo emocionado.
Aunque antes de la pandemia debía caminar alrededor de una hora para llegar al colegio, Justin extraña volver a las aulas de clase pues desde casa estudiar es cada vez más difícil y más aún al no contar con las herramientas tecnológicas necesarias.
Por eso cuando recibió una tableta por su participación en el concurso ‘Mi Voz Cuenta’ liderado por el proyecto ‘El Mundo es mi Hogar’ no pudo contener la alegría.
“Ahora que tengo una tableta todo será mejor. Siempre soñé con tener un aparato electrónico para hacer mis tareas porque es algo muy útil. Esto no me lo esperaba, tengo mucha alegría”, dijo Justin.
“Después de hacer las tareas quiero contactarme con mi tío que está en Perú. Y les digo a los niños del mundo que hay que luchar por lo que uno se proponga y que hay que seguirlo intentando”.
Contexto e información del proyecto:
Villa del Rosario es un municipio de Norte de Santander que limita con el Estado Táchira (Venezuela) que y que junto con El Zulia, San Cayetano y Villa del Rosario hacen parte del área metropolitana de Cúcuta. Por su condición fronteriza es el segundo municipio, después de Cúcuta que alberga al mayor número de migrantes. Según el reporte más reciente de Migración Colombia, en Villa del Rosario hay 37.296 venezolanos de forma permanente. Su economía está muy ligado a la economía en Cúcuta y la zona de frontera por lo que debido a la pandemia por COVID-19 y el cierre de la frontera con Venezuela, sus habitantes han tenido graves inconvenientes para poder subsistir.
En el marco del proyecto ‘El Mundo es mi Hogar’ financiado por Global Affairs Canada, realizamos el concurso ¡Mi Voz Cuenta! que buscaba que los niños y niñas de Norte de Santander, Arauca y La Guajira aportaran sus ideas y creatividad para construir el nuevo nombre y logo de este proyecto. Recibimos en total 93 propuestas. El primer lugar se llevó un computador portátil, los cinco primeros lugares adicionales recibieron una tableta, con el fin de contribuir a la mejora del acceso a las clases virtuales.
Save the Children Colombia inicia su trabajo en Norte de Santander desde 2015, a través de diferentes proyectos. A partir del 2019, iniciamos un acompañamiento en Cúcuta, Villa del Rosario, Los Patios, Pamplona y Sardinata con el proyecto ‘El Mundo es mi Hogar’, centrado en mejorar la realización del derecho a una educación de calidad, segura y con perspectiva de género para las niñas y niños afectados por el conflicto y la crisis en la frontera colombo-venezolana. Con este último proyecto, que se implementará por 31 meses en la zona, se busca beneficiar a más de 30.403 niños, niñas y adolescentes que viven en la zona.